¿Cuáles son los pasos para gozar de buena salud?

Estar mentalmente sano no es simplemente una cuestión de no tener un trastorno mental. Una persona puede vivir con un trastorno mental y seguir experimentando bienestar emocional, lo que se traduce en una vida equilibrada y satisfactoria. Lo contrario también es cierto: la ausencia de un trastorno mental no es garantía de bienestar emocional.

Al igual que la salud física, la salud mental permite sentirse bien con uno mismo. También le permite disfrutar plenamente de la vida, crecer y probar cosas nuevas.

Mantener una buena salud mental es también una de las mejores maneras de prepararse para los momentos difíciles de la vida, ya sean personales o profesionales.

La base de una buena salud mental: el equilibrio

Para mantener una buena salud mental, se recomienda establecer un cierto equilibrio entre los distintos aspectos de la vida:

• social;
• físico
• mental;
• económico;
• espiritual;
• emocional.

Los periodos de la vida (escuela, carrera, vida familiar, etc.), las dificultades y los retos encontrados inclinan a veces la balanza hacia un lado u otro. Entonces puede ser pertinente preguntarse qué cambios hacer para mantener la propia salud mental.

Factores que influyen en la salud mental

Varios factores influyen en la salud mental de una persona:

• características biológicas y genéticas, por ejemplo la herencia
• otras características personales, como estilo de vida y comportamiento, nivel de autoestima o experiencias de la infancia
• el entorno social, por ejemplo, las relaciones con la familia, los amigos y la comunidad
• el entorno vital, por ejemplo, el lugar de residencia o alojamiento, el entorno familiar;
• el entorno laboral, por ejemplo, las condiciones de trabajo, los factores psicosociales (oportunidad de tomar decisiones relacionadas con las propias tareas,
• los vínculos con los colegas, el reconocimiento de la experiencia y las competencias, etc.), la seguridad de los locales
• el contexto económico, por ejemplo, el coste de los bienes de consumo para satisfacer las necesidades básicas, la tasa de desempleo y la distribución de la riqueza en la sociedad.

Hay factores sobre los que no se puede influir, como la herencia o determinados acontecimientos del pasado. Sin embargo, puedes cambiar tus hábitos y comportamientos y tomar ciertas medidas para mantener una buena salud mental.

Medidas que puede tomar para mantener una buena salud mental:

• Adoptar buenos hábitos de vida
• Tómate tiempo para comer bien.
• Asegúrate de dormir lo suficiente.
• Muévete o haz ejercicio todos los días.
• Realice actividades que favorezcan la relajación y el bienestar (yoga, meditación y ejercicios de respiración, actividades creativas o artísticas).
• Reduzca el consumo de estimulantes (café, té, refrescos, bebidas energéticas, chocolate).
• Reduzca o abandone por completo el consumo de alcohol, drogas y tabaco.
• Mantenga su red social
• Mantén relaciones positivas con quienes te rodean: familia, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, etc.
• Participe regularmente en actividades de ocio que le gusten y saque tiempo para ellas.
• Evita estar solo o aislarte si estás atravesando una situación difícil, como un duelo o la pérdida de un empleo. Ponte en contacto con alguien que conozcas o en quien confíes o con un recurso que pueda escucharte, apoyarte o ayudarte.

Un estilo de vida saludable, a diario

La prevención es la mejor manera de mantenerse en forma durante mucho tiempo. En resumen: un estilo de vida saludable, a diario. Consejos y explicaciones punto por punto para mantenerse... ¡sano!

Equilibra tu dieta

¿Por qué? Todos los estudios lo confirman: una alimentación variada y equilibrada es un factor preventivo contra el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, la osteoporosis, la obesidad y la hipercolesterolemia.

¿Cómo podemos hacerlo?

• aumentar el consumo de fruta y verdura para alcanzar una cuota de al menos 5 al día
• consumir alimentos que sean fuentes de calcio (principalmente productos lácteos y, como complemento, verduras e incluso aguas minerales ricas en calcio) para alcanzar la ingesta recomendada de 3 productos lácteos al día
• limitar el consumo de grasas, sobre todo saturadas (carne, embutidos, queso, bollería, etc.)
• aumentar el consumo de alimentos ricos en almidón, especialmente los integrales
• Limite el consumo de azúcar y alimentos ricos en azúcar (refrescos, dulces, mermelada, chocolate, etc.).

Mantente sobrio

¿Por qué? El alcohol es muy calórico (1g = 7Kcal) y se distribuye ampliamente por el organismo antes de ser descompuesto por el hígado en una molécula tóxica. Así, un consumo elevado estaría en el origen de cánceres (boca, faringe, esófago, colon, recto, mama...), y aumentaría el riesgo de mortalidad global, sobre todo cerebrovascular.

¿Qué podemos hacer al respecto? Moderación. Privilegia las bebidas con poco alcohol en detrimento del alcohol fuerte seco o mezclado con gaseosa; bebe despacio y deja el vaso entre sorbo y sorbo; toma un vaso (de alcohol) para el placer y un vaso (de agua) para la sed; no superes el equivalente a 2 copas de vino de 10 cl o 2 cervezas de 25 cl o 6 cl de alcohol fuerte al día. Si estás embarazada, no bebas.

Mover

¿Por qué? Está demostrado que el aumento del gasto energético mediante el ejercicio físico reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes de tipo II, obesidad, cáncer y osteoporosis. El ejercicio regular también mejora la silueta, el bienestar y la autoestima.

¿Cómo se puede ser activo? Puedes ser activo sin ser deportista, y moverte sin cambiar tu estilo de vida. Al menos media hora de marcha rápida al día o su equivalente es suficiente. Así que no dudes en caminar a paso ligero en trayectos cortos, bajar del autobús o del metro una estación antes, hacer la compra a pie en lugar de en coche, desterrar las escaleras mecánicas y los ascensores... El fin de semana, planifica una actividad: bicicleta, patines, marcha, natación, etc.

Dejar de fumar

¿Por qué? Además de las patologías cardiovasculares y los cánceres, el tabaco presenta numerosos riesgos para la mujer: combinado con la píldora, favorece la formación de coágulos, daña las paredes de los vasos sanguíneos y los estrecha, aumentando el riesgo de flebitis y trombosis; acelera la descalcificación; multiplica los riesgos de embarazo ectópico, aborto, parto prematuro, cesárea y retraso del crecimiento del feto.

¿Cómo se puede utilizar? ¡No lo toques! Si es demasiado tarde, ¡busca ayuda!

Cuidado con el sol

¿Por qué? La exposición prolongada al sol daña el capital de la piel. Se acelera el envejecimiento cutáneo y aumenta el riesgo de cataratas. Los rayos UVA y UVB son cancerígenos.

¿Cómo puede protegerse? Evite exponerse en verano entre las 12 y las 16 horas. No salgas nunca al sol sin una capa de crema de factor alto y reaplícatela regularmente. Lleve gafas de sol protectoras, sobre todo en la nieve o en el mar, donde la reverberación es importante.